CAPITULO 66 ____________________FIC 1 semana 7 Días

Una tarde maravillosa, como casi todas las tardes, noches y días por no decir todo el día.

Estar con todos me hacia sentir tranquila y feliz, pero he de reconocer que las palabras de Gustav estuvieron retumbando en mi cabeza toda la tarde, Bill le había pedido a David que me diese algo de trabajo porque lo estaba empezando a volver loco, y encima eso no era lo peor, lo peor era que todos estaban al tanto de esa información menos yo, no me gustaba pensar que los demás al verme pensarían, esta ahí por quien es y no por lo que sabe hacer, eso para mi era como una patada a toda mi vida.

Ya sabe todo el mundo como soy, lo competitiva y exigente y lo mucho que he luchado en esta vida por tener algo y ser alguien, y si, es verdad en ese momento, era la novia-mujer de Bill Kaulitz pero no pretendía seguir así todo el tiempo, quería estar porque me lo mereciese, estar porque supiese, así que he de reconocer que eso poco a poco me fue poniendo furiosa, según lo pensaba en el coche de vuelta a casa.

Bill esta tarde había estado en el estudio, tenia muchas cosas que hacer, así que no lo había visto, pero nada mas entrar en el garaje ya supe que estaba allí, pues su coche estaba allí.

Tenia pensado pedirle un par de explicaciones, dejarle las cosas claras, estaba enfadada.

Pero nada mas abrir la puerta de casa lo escuche cantando, estaba sentado frente al televisor, en el estaban echando un vídeo sobre una de sus primeras giras con la canción sacred.

Bill me vio entrar y tan solo extendió su mano hacia mi, invitándome a sentarme a su lado, al sentarme el me abrazo y me dio un beso en la mejilla y siguió viendo el vídeo sin decirme nada.

- Que distinto era todo entonces- me dijo al terminar el vídeo, con cara y voz nostálgica.

- Mejor o peor?- le pregunte yo un poco extrañada por su actitud

- Diferente, todo era muy diferente, eramos unos niños triunfando en el mundo de la música, que salían al escenario cada noche ante miles de fans locas por nuestra música.

- Aun es así.

- Si, pero no me refiero a eso.

- ¿Entonces?

- A lo solo que me sentía...

- Bill.

- No digo que no lo pasase bien, fue una de mis mejores épocas, muy divertida con cosas nuevas todos los días, pero lo pase mal, cuando me enceraba en mi habitación por las noches me sentía solo.

- Nene, estas nostálgico.

- Esta canción me puso así, las imágenes me trajeron muchos recuerdos.

- Jajajaj , mirate eras tan distinto.

- ¿Si?

- Cambiastes tanto.

- Bueno!! Ya sabes como soy.

- Una continua caja de sorpresas.

Entonces pusieron otro vídeo, pero este era de la ultima gira.

- Creo que es una de mis canciones favoritas.

- ¿Si?

- Si, te escucho a ti, cuando escucho esta canción, te escucho a ti diciéndome una y otra vez que me acercase a ti, que me dejara llevar, que creyese en ti y en el amor.

- ¿Y acaso no tenia razón?

- Si la tenias.

- Silvia, soy muy feliz contigo.

- Y yo contigo- pensé decirle en ese momento que si era tan feliz conmigo, que era eso de buscarme trabajo porque lo estaba volviendo loco, pero pensé que no era el mejor momento, que Bill estaba nostálgico y no iba a ser yo quien quitase la magia a ese momento.

El programa que Bill estaba viendo era un programa nuevo en el que ponían vídeos creados por la audiencia y que les enviaban, habían empezado hacia apenas unas semana y estaba teniendo mucha audiencia, a Bill le habían comentado que en ese día pondrían un par de vídeos sobre ellos y decidió ver lo que las fans mandaban, yo el caso es que sabia perfectamente lo que las fans hacían, yo si me había metido en YouTube a cotillear, el la verdad es que no lo hacia, decía que se aburría de verse a si mismo, y era mejor así, pues algunos vídeos seguro que lo cabrearían y le harian daño, pues hay gente muy dañina por ahí.

Y justo allí teníamos uno ya delante.

Para mi la verdad es que ese vídeo no era ofensivo, es mas me parecía muy bonito que los dos hermanos se quisieran así y se miraran y se entendiesen, tal vez era por que yo sabia lo que era eso, aunque hacia ni me acordaba que entre mi hermano y yo se había perdido esa conexión, pero es que nuestras vidas y nuestras carreras habían sido muy diferentes.

- Lo hecho de menos- dije inconcientemente.

- ¿Que?

- He!!! No nada.

- Dijistes que lo hechos de menos.

- Si, a mi hermano.

- Oh, cariño.

- Sabes, nosotros también estábamos muy unidos y nos hemos separado de una forma muy bestial.

- No digas eso.

- Es verdad Bill, creo que ya no siento nada de el, no siento tus sentimientos ni su estado de animo, ni me rasco al mismo tiempo que el ni nada de nada, sabes en internet hay como mil vídeo sobre esos temas respecto a Tom y a ti, y cuando vosotros habláis de vuestra relación, de vuestros sentimientos de vuestra complicidad, incluso de vuestra empatia me siento extraña, porque yo también tengo un gemelo y creo que rompimos nuestro cordón.

- Creo que a alguien le hace falta hacer un viajecito y pasar unos días entre los brazos de su hermano.

- ¿Que?

- Silvia cariño, que te entiendo, que entiendo muy bien como te sientes y que yo lo pasaría muy mal tanto tiempo lejos de mi familia, he sido un egoísta te he querido a mi lado y no he pensado en ti, y la verdad me extraña que esto no pasara antes.

- ¿Me estas diciendo que me vaya?- dije un poco alterada por las palabras de Bill.

- Si, te estoy diciendo que te marches, que te largues a España.

- Bill.

- Lo necesitas.

- Pero, no entiendo.

- Nena- me dijo agarrándome la cara con las dos manos- ve a España, pasa unos días con tu hermano, soy tu marido no tu carcelero.

- Ah- dije casi aliviada, por un momento pensé que Bill me estaba dando puerta, y he de decir que me estaba faltando el aire.

***********************

Silvia y Bill no es que saliesen mucho, pero era sábado por la noche, no habíamos estado en el estudio en todo el día y estaba mas que claro que al día siguiente tampoco íbamos a ir, así que les di la lata durante toda la cena para que saliesen.

Yo sabia muy bien que a Silvia le encantaba ir a bailar, pero también sabia muy bien que Bill odiaba bailar y aun odiaba mas ir a un sitio y no poder estar besando y agarrando a su mujercita todo lo que quisiera por miedo a que alguien descubriera su relación.

Pero a cabezón no me ganan ni los dos juntos así que esa noche arrastre a todos conmigo a un sitio nuevo, en el cual que habían comentado que estaban las mejores chicas y la mejor música.

Bueno ya estábamos allí y no me habían mentido, aquel sitio era impresionante, parecía un teatro antiguo por dentro, con mil lamparitas que iluminaban toda la sala de una forma muy extraña y a la vez impresionante para la vista.

Los chicos y yo siempre permanecíamos en una zona reservada para no tener problemas y para no alejarnos mucho de la barra, pero las chicas era otra historia, ellas salían y entraban, les gustaba bailar en medio del follón y coquetear con los chicos que tenían alrededor, cosa que no les resultaba muy difícil, pues si una cosa tengo que reconocer es que las chicas de mis compañeros eran todas unas autenticas preciosidades.

La noche fue transcurriendo muy bien, muy divertida entre risas, copas y conversaciones.

Mi hermano estaba asomado a una especie de palco desde el que se podía ver toda la pista.

- Que controlando a tu chica- le dije asomándome.

- No, solo estaba mirando.

- Reconócelo te pone celoso ver a otros chicos hablando con ella.

- No, de verdad que no.

Bueno si el lo decía seria verdad, así que lo deje así, no quise decirle nada mas, vaya que por mis palabras al final empezase con las neuras.

- Silvia se va a España- me dijo pasados unos minutos en los que los dos habíamos estado en silencio observando todo lo que pasaba allí abajo.

- ¿Que?- conteste super sorprendido, era lo ultimo que me imaginaba escuchar- ¿pero por que? ¿Discutieron?

- No, no.

- Entonces.

- La he retenido aquí sin pensar en ella.

- Pero, no entiendo.

- echa de menos a su familia, su casa, su gente.

- bueno, pero eso es normal.

- si, pero no se si sabré estar sin ella, no nos hemos separado desde que nos casamos.

- bueno.

- deja el cachondeo Tom, fue una boda.

- vale no me cachondeo.

Bill parecía estar afectado por la partida de Silvia, lo único que no le hacia falta era que yo me cachondeara así que pare, lo mire y vi que estaba fijo en la zona de abajo, así que seguí su mirada.

Estaba mirando a Silvia y a María que hablaban con un par de chicos, María estaba hablando con uno de ellos y al parecer le había dicho que estaba casada pues le enseño su alianza, el otro chico que había junto a Silvia se acerco a decirle algo, no se que le contestaría esta, pues el chico agarro su mano y miro el tatuaje del dedo de Silvia. Justo en ese momento apareció una sonrisa en el rostro serio de mi hermano y volvió a la barra.

Yo seguí durante unos segundos mirando a las chicas y todo el follón de gente que había en la parte de abajo, no entendía como les podía gustar estar metidas entre tanta gente en vez de allí arriba con nosotros donde tenían sitio de sobra,,,,, no, miento, la verdad es que a mí también me gustaría estar metido en ese follón y que nadie se girara a mirarme ni ha hacerme una foto, ni siquiera ha hablar con migo, excepto si era una chica guapa, en ese caso era otra cosa.

Y hablando de chicas guapas, donde hay una siempre suele haber muchos chicos alrededor, así que en cuanto vi un grupo de chicos juntos revoloteando me fije, y allí estaba, no lo podía creer, era ella, la chica misterio de aquella noche y del aeropuerto, la puta casualidad, cuantas posibilidades había de volver a encontrármela; 1 entre un millón, pues allí estaba, bella, preciosa, sexy, seductora, tan solo con mirarla me ponía el bello de punta, esa chica era una diosa, una autentica diosa.

- Huy huy, que fijo esta el cazador Tom en su presa- dijo Silvia llegando junto a mi a estilo locutora de televisión.

Yo ni le conteste, la mire de reojo y rápidamente volví a mirar a esa preciosidad, no quería perderla de vista.

- Guapa, si señor muy guapa- volvió a decir Silvia que estaba ya junto a mi y mirando hacia donde yo había pegado mis ojos.

- ¿Que estas hablando?

- ¡¡¡Que nos conocemos Tom!!! Ya se perfectamente lo que pasa por tu cabeza.

- ¿Si que pasa?

- Que te quieres comer ese bombón.

- Jajajjajajaj, vale, si me conoces.

- Ve.

- Jaja, si claro.

- ¿Por que no?

- Si bajo ahí se lía la de Dios.

- Tal vez si, tal vez no, si no vas nunca sabrás lo que puede pasar.

- ¿Tu crees?

- Tenlo por seguro.

- No sé.

- Joder Tom, de verdad que nunca pensé que te costase tanto.

- ¿Que me costase tanto, que?

- Presentarte a una chica.

- Y no me cuesta.

- Pues venga tigre adelante.

- ¿Me estas azuzando?

- Si.

- ¿Porque? Yo pensé….

- Yo pensé, yo creí, eso son tonterías, quiero verte sonreír y si es así pues así será, ella esta lejos, tú estas aquí, hace un año y todo paso, así que ve y habla con esa chica, no mejor, ¡¡ven!!

Agarro mi mano y tiro de mí tras ella, haciéndome bajar a la planta de abajo, al medio de la pista.

- Sígueme el rollo, ¿vale?

- Vale.

Silvia empezó a bailar conmigo, y yo mas o menos empecé a moverme a su ritmo, me sorprendió que nadie me dijese nada, mire hacia el palco donde estábamos para ver si alguien miraba, y efectivamente, allí estaba mi hermano viendo como su mujer bailaba conmigo.

No se como paso, pero de repente y sin saber porque Silvia me empujo y tropecé con alguien dándole un fuerte pisotón, pude incluso escuchar el chillido de la chica al caer mi gran pie sobre el suyo.

- Perdona, lo siento, yo…..- dije rápidamente girándome hacia mi pobre aplastada y agarrándola por los brazos al disculparme.

- Vale vale, no te preocupes no pasa nada- me contesto una voz dulce y suave.

Levante los ojos hacia el rostro de la chica y allí la tenia, otra vez agarrada por un tropiezo con ella.

- Creo que vamos a tener que dejar de encontrarnos de esta manera

Al descubrir que era ella y hablarme de esa manera una sonrisa de tonto apareció en mi boca.

- La verdad es que si, vamos a tener que dejar de darnos golpes.

- Bueno.

- Bien.

- Jajjaja, esto empieza a ser raro.

- Creo que después de tanto golpe seria mejor presentarnos.

- ¿Si?

- Hola soy Tom.

- Hola Tom, quieres una copa.

- ¿Como?

- ¿Que si quieres una copa?

Me quede de piedra, jamás en toda mi vida una tía me había entrado así, creo que nunca pero nunca nunca me habían invitado a una copa, era tan novedoso aquello que creo que ni conteste, tan solo la seguí como un perrito por la pista hasta llegar a la barra.

- Que bebes?

- Whisky Glenfiddich con cola

- Hum, buen gusto, un whisky con estilo

- Me gusta lo bueno

- Y lo mayor

- Lo mayor?

- Si tiene 50 años, segura mente que ni tu madre tiene esa edad

- Jajajjaja- me tuve que reír me había desmontado por completo, me entro a mi, me invito a una copa y encima sabia de lo que hablaba, esa chica tenia estilo, si señor, guapa y con estilo, me encantaba.

Conversamos y no os puedo decir ni de que, pues me tenia totalmente fascinado, baile con ella durante horas, pero horas que se hicieron minutos, pues estaba en la gloria con ella, además de bastante borracho, la chica era sexy y caliente, bailaba con migo de una forma que me hacia sentirme vivo.

Reímos muchísimo, estábamos pasando un muy buen rato.

Pero, sin saber como paso, llego un chico, la agarro por la cintura y le dio un pico en los labios, me quede un poco extrañado, estaba claro que lo conocía, si no de que se iba a comportar así. Pero, si le daba un beso era por que eran algo mas, y si eran algo mas por que llevaba toda la noche tonteando conmigo

Ella me vio mirando algo extrañado y nos presento.

- El es Tom, un chico con el que parece que estoy destinada a tropezar, el es Jack una de las personas mas importantes en mi vida.

- Hola tío- me dijo este tal Jack chocándome la mano.

- Hola- le conteste yo.

- Nena, tenemos que irnos, ya están todos fuera esperándonos.

- Ok, ahora mismo voy.

- Venga te espero fuera, Tom tío, nos vemos, encantado de haberte conocido.

- Venga, adiós- si anda vete capullo, pensé para mis adentros.

La mire y no se que cara tenia que tener, tal vez la de un tonto que ha estado toda la noche haciendo el tonto con una tía y que al final la tía resulta que tiene novio y que le ha comido los morros enfrente de mi cara.

- ¿Que pasa? – pregunto

- No, nada, no sé, explicame tu.

- ¿Que te explique que?

- ¿Era tu novio?

- Pues no creo que eso importe.

- ¿No?

- No.

- Bueno pues nada, yo pensé otra cosa.

- ¿Que pensaste que por que te invite a una copa, pase la noche bailando y charlando contigo ya nos íbamos a ir a la cama?

- No, pero tampoco pensé que estuvieses tonteando conmigo si tenia un chico.

- No preguntastes.

- No creí que fuese necesario.

- Si tú lo dices.

- Bueno, pues nada emm….. – me quede pensando, creo que no recordaba su nombre.

- ¿Emmm…….?

- Creo que no me dijiste tu nombre.

- Es que los nombres solo son eso, nombres, así que no te lo dije, me recordaras mas sin saberlo, y desearas mas verme otro día nada mas que por enterarte de mi nombre Tom Kaulitz.

Se me acerco y me planto un beso en los labios tan intenso que no se ni si reaccione.

Me había dejado tan tonto aquel misterio de chica que la verdad es que durante los siguientes días era lo único que tenia en la cabeza,

Su imagen, la del chico besándola, la de sus palabras invitándome a una copa, la del besazo que me planto sin yo hacer nada. Era increíble.

Me ponía cachondo cada vez que pensaba en ella.

Aquella chica había hecho que la deseara como a ninguna otra antes.